La llegada de un bebé al hogar es momento muy especial y mágico para una familia. La felicidad y la alegría lo invaden todo a la vez que comienzan multitud de preparativos para tener todo listo cuando llegue el esperado momento. Es hora de visitar cientos de establecimientos para encontrar la mejor cuna, biberones, chupetes, pañales, carros de bebé para esos necesarios paseos y ropa, mucha ropa ¿Pero dónde meteremos todo lo necesario para nuestro bebé? Naturalmente, en un cuarto totalmente adaptado a él donde tenerlo todo a mano. Y dentro de todos esos bonitos muebles, será preciso escoger el armario para bebé ideal.
Pero de la teoría a la práctica siempre hay un gran paso, ya que cuando el bebé llega comienza esa pequeña lucha por mantener el orden y que no cunda el caos en el hogar. Con un recién nacido, la falta de tiempo es una realidad, por ello es común no tener todo el tiempo que quisiéramos para ordenar y mantener su ropa colocada en el armario. Aun así, hay que procurar al máximo no descuidar esta cuestión, ya que es importante para nuestros niveles de estrés que la habitación del pequeño no se convierta en una jungla.
Por otro lado, no hay que dejar de tener en cuenta que un armario infantil no es igual que un armario que utiliza un adulto. Un bebé suele acumular mucha ropa, primero porque crecen muy deprisa, rápidamente la ropa se queda pequeña y es necesario tener variedad de tallas. Además, seguro que muchos de tus familiares y amigos optan por regalarte algún conjunto o ropa interior. En resumen, es lógico que necesites un espacio específico para guardar toda su ropita de la mejor manera.
CÓMO ORGANIZAR UN ARMARIO DE BEBÉ SIN GASTAR MUCHO TIEMPO
Seguro que alguna vez has ido a coger cualquier cosa rápido al armario de tu bebé y no lo has encontrado. Puede que, al tener todo un tamaño muy pequeño, confundamos lo que es una camiseta, con un body o con un pijama. Ante eso, el primer consejo es separar muy bien las prendas por tipo y por uso ¿Qué quiere decir por uso? Que no es lo mismo la ropa para salir a la calle que aquellas prendas más cómodas con las que estar en casa.
Una vez hayamos diferenciado bien el tipo de prenda y el uso que le vamos a dar, estableceremos una prioridad de orden. Es decir, colocaremos más a mano aquellas cosas que requiramos más; como los pijamas limpios que necesitaremos cada tarde tras el baño. Siguiendo esto, es probable que no necesites tener delante esos conjuntos para salir a pasear. Para clasificar y hacer una separación correcta, divide la ropa en los cajones. No te preocupes si tu armario no cuenta con demasiados compartimentos, ya que puedes hacerte con cajas que sirvan de separadores. Lo importante es intentar no llegar a mezclar las prendas.
Sobre la forma de doblar, también tenemos un consejo para ti. Ya hemos nombrado en otros artículos anteriores que, en muchas ocasiones, aplicar las prendas dobladas no es buena idea. Crear altas pilas puede generar más desorden aun al intentar acceder a alguna de las prendas de abajo. Por eso, en la medida de lo posible, os recomendamos doblar en paquetes y colocarlos en filas. De esta forma, tendrás acceso a toda la ropa y, al sacarla, ninguna otra se descolocará. Si crees que tu armario no se adapta a este tip del orden, quizás sea una opción pensar en un armario a medida.
Hemos hablado de doblar pero ¿Qué pasa con las perchas? Si el armario de nuestro bebé cuenta con una barra, no la desaproveches. En cualquier bazar podrás encontrar perchas pequeñas que se adapten al tamaño de la ropa de tu pequeño. Lo más común es reservar este espacio para las prendas más especiales. Nos referimos a esos preciosos trajes, vestidos, camisas y pantalones de vestir que sólo escogeremos en ocasiones especiales pero no queremos que se arruguen ni de deterioren.
DÓNDE COLOCAR LOS ZAPATOS Y ACCESORIOS DEL BEBÉ
En los primeros meses de vida, a los bebés se les coloca calcetines o patucos en lugar de zapatos. Sin embargo, en la actualidad podemos encontrar estos mismos patucos adaptados a las modas. Algunos incluso son réplicas de las zapatillas de deporte más populares. Entonces, necesitaremos un espacio en el armario para guardar y tener a un solo golpe de vista todo su calzado. Aquí volvemos a recomendarte que reserves un cajón o un compartimento para zapatos y calcetines.
De nuevo, separa por aquellos que utilizarás más a menudo y deja los que crees que se pondrá menos a un lado. Si no te convence tenerlos en cajones o cajitas separadoras, puede llevarlos a un zapatero exterior o incluso colgarlos ¿Cómo los puedes colgar? Fíjate que algunos de los zapatos pequeños que se venden en las tiendas cuentan con una pequeña lengüeta que permite que los zapatitos sean colgados en ganchos. Puedes colocar ganchos en las puertas del armario y tener así a mano todo el calzado que más utiliza.
Otros accesorios que también necesitarás cada día serán baberos, gorritos e incluso mantitas. Estos objetos también pueden tener un espacio en el armario del bebé y, si los doblas en paquetes como hemos señalado, los podrás visualizar y alcanzar mejor. Por último, si después de una sesión de orden te queda espacio, puedes dedicarlo a almacenar esos productos que no están empezados pero que necesitarías tener a mano si el que ya tienes se termina. Hablamos de cremas, jabones, toallas o pañales. Nadie quiere tener que sumergirse entre una montaña de ropa para encontrar un pañal limpio.
Pero no podemos terminar este blog sin remarcar que mantener el orden será una cuestión de constancia y organización. En un armario de bebé entra y sale ropa constantemente por la necesidad de lavarla cada vez que se mancha, igual que sucede con los niños más grandes. Por ello dedicar unos minutos a colocar tanto esa ropa limpia de la colada, como ese traje nuevo que te han regalado, será primordial. Y si necesitas un armario que se adapte por completo a tus necesidades, no olvides llamarnos y te ayudamos con un armario a medida o con el armario que precises.